Muchas veces, el valor de un mueble reside en la carga sentimental que tiene, es el caso de este antiguo armario para medicinas, una pieza que perteneció a la abuela de su actual propietaria y que después de largo tiempo recupera su protagonismo y su función.
Limpiamos bien la madera y aplicamos dos capas de pintura tiza color beige y un par de manos de barniz protector.
Empapelamos el interior y colocamos un espejo en la puerta.
El armario y la mesita se han convertido en el foco de atención de este espacio.
Con esta entrada nos unimos al "Finde frugal" del blog de Marcela, "Colorín colorado", que cada fin de semana se convierte en una fiesta de buenas ideas.
¡Es una pieza preciosa, delicada y muy coqueta que habéis recuperado con un gusto exquisito!😉
ResponderEliminarBesos.
Que maravilla!!!!
ResponderEliminarRecuerdo uno igual casa de mi abuela, es el valor sentimental de la pieza la que la hace especial.
Te ha quedado un conjunto precioso, felicidades.
Besitos
Hola amiga!!!
ResponderEliminarMe parece un trabajo preciosos, el que has realizado
Unos muebles como bien dices con una carga sentimental
atrás , que hay que darle nuevas oportunidades.
Quedaron divinos
Muchos besos
Me encantan estas piezas llenas de historia, y me encanta ver que las luces en un cuarto de baño junto con esa preciosa mesita. Siempre digo que son fantásticos muebles auxiliares que tienen cabida incluso en el baño, como has hecho tú con tanto acierto.
ResponderEliminarPreciosa pareja!
Un beso fuerte.
Que piezas tan bonitas, el armario es un pequeño tesoro para conservar...su dueña sabe valorar lo que tiene.
ResponderEliminarBESOS